

El reloj “Pasha” de Cartier ha sido, desde el mismo momento de su creación, todo un objeto de culto. En ello tiene mucho que ver su peculiar diseño, capaz de combinar dos formas geométricas en una sola: el círculo y el cuadrado.
La cronografía, dada su utilidad y la complejidad de su funcionamiento, es una de la funciones más apreciadas por los aficionados a la relojería.
Desde los tiempos en los que reinaban los cronómetros marinos, el desarrollo de la relojería se ha visto fuertemente ligado al mundo del mar, e incluso algunas complicaciones relojeras sitúan sus orígenes en aquellos pioneros de la navegación.
Existe un tipo de elegancia que no pasa desapercibida, que radica en pequeños detalles de estilo y buen gusto, pero que en cierto modo constituye un todo. Los relojes forman parte de este universo de la personalidad propia y bien definida, y entre ellos, de manera especial, los intemporales, de carácter eterno y con ciertos componentes retro.
Desde hace algunos años los relojes conectados e inteligentes forman parte del universo relojero. las distintas marcas, tanto de gamas altas como medias y de modo transversal, desarrollan sus propias versiones.